sábado, 28 de junio de 2008

Segunda ola neoliberal

Si el actual plan del gobierno se cumpliese, es un decir, tendríamos en unos años una Amazonía difícil de atravesar por en el número de enormes bosques privados que nos cerrarían el paso. Tal vez en la sierra nos cruzaríamos con grandes pastizales de ex comunidades, convertidos en negocios particulares, y casi seguro veríamos los confines de las empresas mineras perdiéndose en el horizonte en territorios cercados, con ríos y lagunas a su interior. Y todo estos se habría hecho para modernizar al país y atraer la inversión. Santa palabra.
Pasaría también en los puertos, distribuidos entre empresarios extranjeros, varios de ellos, probablemente, de origen chileno, rompiendo la unidad del servicio, a favor de las mayores utilidades, y eliminando los derechos sindicales para reducir las resistencias y preparar el despido masivo. Algo parecido va a pasar con las grandes empresas pesqueras cuando se les revalorice, con el añadido de la cuota pesquera que el “honesto” Rey (Aldo M) quiere regalarles a costa de reducir el espacio para la mediana y pequeña pesquería. Y vienen más medidas, como las que quieren facilitar la reducción de la planilla estatal con el pretexto de los méritos, o las de administración privada de servicios educativos estatales y de seguridad social, que se vocean.
Generación de reformas. En otras palabras la nueva ola o “segunda generación de reformas” neoliberales, no responderían al trillado discurso de la institucionalización y la reforma del Estado, como se ha dicho tantas veces, a la conformación de una justicia más confiable, una administración más transparente, una educación más productiva, una salud masificada, etc., sino a un ataque directo a la pequeña y mediana propiedad nacional, para concentrarla en grandes inversiones, principalmente extranjeras. Si en los 90 la consigna era lo estatal es malo, ahora en los 2000, la pauta es: lo pequeño y difundido, o simplemente lo que no es grande y poderoso (discurso a los empresarios brasileños después de la Cumbre: ¿qué hacen invirtiendo apenas 200 o 300 millones de dólares?), es fuente de pobreza y obstáculo a la modernidad.
García sufre una enfermedad de gigantismo, no sólo físico, sino ideológico, que le hace creer que los problemas del país se deben a nuestras dificultades para abrirnos al mundo que crece y a nuestro complejo de inferioridad de hacer negocios chicos. No logra comprender cuánto tienen que ver el atraso y la desventaja con las que el país entró a los marcos de la globalización neoliberal, al punto que todas las condiciones se nos impusieron desde fuera y cuánto con el hecho que los peruanos nos hayamos tenido que refugiar en los pequeños, micro y negocios individuales, en el autoempleo y en la informalidad, para subsistir y salir adelante, con el desastre que nos regaló el presidente del 85-90, y el ajuste posterior.
Raúl Wiener

miércoles, 25 de junio de 2008

El paro nacional va… sí o sí

CGTP a Del Castillo: “Es tarde para dialogar”. Ratifican jornada, a pesar de llamados a negociar, que consideran manotazos desesperados. Hoy empiezan jornadas previas de protesta.

Para la Confederación General de Trabajadores del Perú (CGTP) son tardíos e infructuosos los intentos del gobierno por evitar el paro nacional del 9 de julio, en vista de los recientes llamados al diálogo. A dos semanas de la jornada nacional de lucha, desde dicha central sindical ratificaron ayer que no darán marcha atrás porque ya lograron el respaldo total de los frentes regionales del país y “no pueden traicionar la voluntad expresada por miles de trabajadores”.

Numerosos sindicatos inconformes por promesas incumplidas alistan masivas protestas, que se inician hoy.

Pese a la convocatoria al diálogo formulada por el premier Jorge Del Castillo y la reciente promulgación de la Ley de Tercerización, tras la cual el presidente Alan García anunció su adherencia a la causa de los trabajadores, la CGTP enfatizó su postura: “El paro va sí o sí”. Descartan concesiones con un gobierno que –consideran– “promueve el hambre, el entreguismo y la represión”.

Ésta fue la postura expresada por el secretario general de la CGTP, Mario Huamán, quien señaló que las reuniones con el primer ministro generalmente han derivado en promesas que nunca se cumplieron y en la tristemente célebre “mecedora”.

“Ahora que el paro nacional ya está en marcha, el gobierno recién se preocupa por convocarnos a dialogar. Nosotros participamos del casi moribundo Acuerdo Nacional y del Consejo Nacional de Trabajo, porque nunca nos hemos negado a conversar, pero lamentablemente siempre hemos ­caído en reuniones infructuosas”, declaró Huamán.

Mención aparte mereció para el representante sindical la presencia en escena de la Confederación de Trabajadores del Perú (CTP), a cuyos líderes calificó como “voceros oficiosos del gobierno”.

“Que el premier converse con la CTP sólo representa una reunión entre apristas. Nosotros no podemos conversar con quienes siempre nos han mecido”, acotó el secretario general de la CGTP.

Temen represión
Para Mario Huamán, que congresistas oficialistas como Mauricio Mulder y algunos ministros intenten desvirtuar la protesta ciudadana relacionándola con violencia, desmanes y desestabilización al país, sólo significa que ya está en marcha el intento de boico­tear el paro, para lo cual se podrían sembrar infiltrados que destruyan propiedades públicas o privadas.

El dirigente puntualizó que, ni en la jornada de hace cuatro años (en la que participó el hoy presidente García) ni en las dos movilizaciones del año pasado se registraron incidentes violentos. “Parece que algunos miembros del gobierno están buscando allanar el camino para tildarnos de violentistas y desestabilizadores”, apuntó.

De otro lado, la CGTP anunció que ya está lista la plataforma de lucha que incluye a todas las regiones del país. Indicaron que en la selva ya se definió que del 8 al 10 de julio próximo la población protestará contra la denominada “Ley de la Selva” y que en el sur (Cusco, Arequipa y Puno) la adherencia al paro nacional está garantizada.

Asimismo, en Ayacucho se ­alistan movilizaciones para el 8 y 9 de julio contra la presencia de tropas norteamericanas, mismas fechas escogidas por el sector agrario para reclamar por los altos costos de sus insumos y la venta de terrenos a empresas trasnacionales.

Polémicos decretos
Los recientes decretos legislativos referidos a la creación de un cuerpo de gerentes públicos y evaluaciones para medir el rendimiento de los trabajadores estatales, motivaron el pronunciamiento de la Confederación Intersectorial de Trabajadores Estatales (CITE), cuyo secretario general, Winston Huamán Enríquez, anunció el inicio de la recolección de firmas para el pedido de inconstitucionalidad.

Huamán Enríquez denunció que se pretende realizar un copamiento aprista de la administración estatal y enfatizó que no se niegan a la evaluación, aunque manifestó desconfiar de la transparencia de la misma.

También participó del pronunciamiento Adolfo Granadino, secretario general de la Federación Nacional de Trabajadores de la Empresa Nacional de Puertos (Fentenapu), quien ratificó el rechazo de su gremio al decreto legislativo 1022, que impulsa la transferencia de todos los bienes que administra Enapu al Ministerio de Transportes y Comunicaciones. Para Granadino, esa medida sólo posibilitará el traspaso definitivo de los puertos a capitales chilenos, entregando una actividad estratégica del país.

Jornada de protestas remecerá la capital
Las universidades públicas se paralizan. Hoy se realizará una masiva movilización de los docentes, trabajadores y estudiantes universitarios hacia el Congreso de la República, el Tribunal Constitucional y el Ministerio de Economía, para lo cual ya llegaron delegaciones del interior del país.

Los catedráticos de la Fendup reclaman por el cumplimiento de la tercera etapa de la homologación de sus sueldos con los magistrados del Poder Judicial, el pago del monto correspondiente por el mismo proceso del período junio-noviembre del año pasado, y la inconstitucionalidad del decreto de urgencia que modificó las categorías de docentes.

Por su parte, los trabajadores universitarios exigen que el Ejecutivo cumpla con el incremento de 100 nuevos soles en sus sueldos, al que el premier Jorge Del Castillo se comprometió en enero pasado. Finalmente, ambos gremios coinciden con los estudiantes en solicitar el archivamiento del proyecto de ley 939, que plantea eliminar la gratuidad de la enseñanza para los ex alumnos de colegios privados.

También los integrantes de la Federación Médica suspenden hoy sus labores y protestarán frente al Ministerio de Salud por el incumplimiento de los acuerdos firmados con el ministro Hernán Garrido-Lecca. A ellos se sumará el personal del Instituto Nacional Penitenciario (Inpe), que abandonará las cárceles y se concentrará en el penal San Jorge para pedir que se les asigne los 500 soles prometidos en sus exiguas remuneraciones.

domingo, 22 de junio de 2008

EE.UU. SE RETIRA DEL CONSEJO DE DERECHOS HUMANOS DE LA ONU

NUEVA OFENSA A LA COMUNIDAD DE NACIONES
Graciela Ramírez


Estados Unidos acaba de retirarse del Consejo de Derechos Humanos de la ONU. El airado portazo del gobierno de Bush refleja la debilidad, la decadencia y la profunda crisis en la que está sumido el país más poderoso del planeta.

Lejos de mostrar la fortaleza, que sólo tiene a nivel armamentista como potencia imperial, la retirada de EE.UU. del CDH deja a las claras el enorme desprestigio de la administración Bush, a tenor de los propios norteamericanos, la peor de su historia.

El cineasta Michael Moore comenta desde su Web que acaban de cumplirse 1347 días de guerra y ocupación militar en Irak.."hemos estado más tiempo en Irak del que nos llevó toda la Segunda Guerra Mundial..()..después de tres años y medio ni siquiera podemos tomar una simple carretera..()...Es una guerra perdida porque nunca tuvo el derecho a la victoria; perdida porque fue iniciada por hombres que nunca han estado en una guerra, por hombres que se esconden detrás de otros enviados para luchar y morir. (1)

El descrédito del gobierno de Bush desde su ilegal y falsa guerra contra el terrorismo, está llenando de vergüenza al propio pueblo norteamericano. Los informes, cada día más abundantes de organismos internacionales, denuncian métodos aberrantes de tortura, vuelos secretos de la CIA, multiplicación de campos de concentración como los de Abu Graib y Guantánamo, se suman a su histórica complicidad con el estado sionista de Israel contra el pueblo palestino. En el informe de Amnistía Internacional del 2008, las violaciones de EEUU a los derechos humanos ocupan varias páginas (2).

El mismo país que se arroga la facultad de certificar la conducta del mundo en esta materia, es el que hoy pretende desprestigiar la labor que viene desarrollando la CDH. Con esto demuestra una vez más, sus incontables torpezas diplomáticas y realiza una nueva ofensa a las Naciones Unidas.


Por qué se ha retirado?

En realidad, muchos observadores lo preveían desde la misma hora en que le fue asignado un puesto como observador ante el Consejo, en esta ocasión, no tenía posibilidades de manipular en favor de sus intereses como lo hizo en la extinta Comisión de Derechos Humanos. La misma desdichada Comisión en que terroristas de origen cubano como Armando Valladares o Luis Zúñiga Rey, ocupaban los máximos puestos, para escarnio de la Patria de Lincoln.

EE.UU. carece de capacidad moral para enfrentar las críticas sistemáticas del actual Consejo y sus Relatorías sobre la violación de los derechos humanos. No tiene argumentos para responder ante las resoluciones del Comité de Derechos Humanos de la ONU y del Grupo de Detenciones Arbitrarias sobre el tratamiento cruel e inhumano dado a los prisioneros de la Base Naval de Guantánamo, aún no ha respondido al dictamen del grupo sobre el carácter arbitrario e ilegal de las detenciones de los Cinco cubanos.(3) Tampoco ha dado respuesta a los informes críticos de otras relatorías, como el de Martin Scheinin, Relator contra Terrorismo.

El nivel de disgusto de EE.UU. con el Consejo, aumentó ante la victoria aplastante de Cuba durante el sexto período de sesiones. (4) Esto provocó la inmediata reacción de la congresista cubano-americana Ileana Ros Lehtinen quien impulsó una resolución ante la Cámara de Representantes para suspender indefinidamente los fondos que EE.UU. está obligado a dar al Consejo.

Al retirarse y solicitar la anulación de sus compromisos económicos, no hacen más que fortalecer la credibilidad del Consejo de Derechos Humanos ante la comunidad internacional que lejos de lamentarse, ha decidido con la Sra. Louse Arbour al frente, defender su honorabilidad, su independencia y su prestigio.

Mientras preparaba la información para este Art. venía a mi memoria la denuncia realizada por el canciller cubano Felipe Pérez Roque hace a penas un mes, sobre la confabulación de diplomáticos norteamericanos para rebajarle la condena a terroristas como Santiago Álvarez y la entrega de sumas de dinero, utilizando a los propios diplomáticos como vulgares mulas, a personas a sueldo del gobierno de EE.UU. como la sra. Martha Beatriz Roque. (5)

Resulta paradójico que el país que pretende imponer su falsa guerra contra el terrorismo y se dice máximo defensor de los derechos humanos, mantenga encarcelados desde hace diez años a Cinco cubanos que intentaron advertir a su pueblo sobre los planes terroristas que se fraguan en Miami, abandone un organismo como el Consejo de Derechos Humanos de la ONU, le quite sus fondos, y estos, mucho más abultados, terminen en manos de terroristas y mercenarios.

Gore Vidal nos decía en relación al doble rasero de la administración Bush y su profunda decadencia: “El caso de los Cinco es una prueba más de que tenemos una crisis de derecho, una crisis política y una crisis constitucional.” (6)



Notas:
(1)Carta de Michael Moore - 10 -06-2008
(2)Informe Amnesty International 2008 - 28-05-2008
(3)Opinión del Grupo de Detenciones Arbitrarias de la ONU - 27-05-2005
(4)Victoria de Cuba sobre la necesidad de poner fin al ilegal bloqueo norteamericano sobre la isla.
(5)Cuba emplaza a Bush y su Gobierno. Conferencia de Prensa de Felipe Pérez Roque, Ministro de Relaciones Exteriores de Cuba. 22-05-2008
6)Gore Vidal, escritor y dramaturgo estadounidense.

viernes, 20 de junio de 2008

En Moquegua festejan y en Tacna protestan

Plaza de Armas de Moquegua fue una fiesta y Tacna prepara protestas.

Moquegua fue una fiesta. Terminada la asamblea que empezó poco después de las cinco de la tarde de ayer en el puente Montalvo, la multitud se trasladó hacia la Plaza de Armas y, tras una breve ceremonia, se entregó al canto y las danzas para festejar uno de los triunfos populares más notables de los últimos años.
El pueblo de Moquegua celebró la derrota política del gobierno que, vencido por la contundencia de las movilizaciones, tuvo que dar marcha atrás en casi todas sus pretensiones.
Quedaron atrás las calumnias sobre el carácter de la protesta. El premier Jorge del Castillo no volvió a decir que las movilizaciones de Moquegua eran promovidas por un grupito de agitadores ni amenazar con cadena perpetua a quienes participaran en el bloqueo de carreteras dispuesto por el Frente de Defensa de los Intereses de Moquegua.
Al contrario, a nombre del gobierno, tuvo que aceptar que en “la región Moquegua existe la necesidad de ejecutar proyectos de inversión públicos o privados por montos equivalentes a S/. 82 millones adicionales para cubrir los urgentes requerimientos de su población, preferentemente en zonas de pobreza y extrema pobreza”, tal como se indica en el primero de los acuerdos pactados con la representación de alcaldes y dirigentes populares que viajó a Lima.
El acuerdo remarca que “el gobierno central facilitará la inversión en tales proyectos”.
Señala también qué distritos de las provincias General Sánchez Cerro y Mariscal Nieto deberán presentar proyectos de inversión “por montos equivalentes a lo dejado de percibir por concepto de canon el año pasado”.
Dispone, además, que la legislación será modificada para que las grandes empresas mineras que realizan operaciones en más de un departamento, lleven las cuentas de cada mina en libros separados.
El acta suscrita en Lima y aceptada por las poblaciones de las localidades de Ilo y Moquegua tiene 8 puntos que en conjunto totalizan 447 millones de soles para obras y contempla la instalación de una mesa de trabajo técnica que haga posible la ejecución de todos los acuerdos.

Mientras tanto, el desbloqueo del puente Montalvo hizo que se normalizara el tránsito por la carretera Panamericana. El transporte interprovincial reinició sus viajes a Arequipa, Tacna y Lima. Los comerciantes volvieron a abrir sus negocios y ya se piensa en las festividades del recién establecido “Día de la unidad y la dignidad moqueguana” para el venidero 17 de junio.

Organizaciones evalúan medidas
Ni bien se conoció el texto del acta firmada entre el gobierno nacional y los representantes del pueblo de Moquegua, las autoridades regionales y locales de Tacna convocaron a una asamblea general de emergencia y advirtieron que se opondrán a la implementación de los acuerdos.

Sobre todo del tercer punto, que recoge la disposición de que la Southern Copper llevará por separado las cuentas de sus minas Cuajone y Toquepala, ubicadas en los departamentos de Moquegua y Tacna, respectivamente.

En efecto, el documento señala que “el Ejecutivo propondrá las normas legales necesarias que permitan la elaboración de contabilidades separadas”. “Entonces que separen también el agua, que es tomada de reservorios que se encuentran en Tacna y sirven para el proceso minero de Cuajone; y los pasivos ambientales, que se generan en Moquegua pero contaminan nuestro departamento”, afirmó el consejero regional Julio Peralta, en un aparte de la reunión. Sostuvo también que no permitirán la ejecución de los acuerdos si es que los proyectos que presenten las autoridades moqueguanas empiezan a ser financiados sin la fiscalización de los representantes tacneños.

Los choferes también anunciaron medidas de lucha. “Moquegua ha conseguido más plata perjudicando el transporte hacia nuestra ciudad. Por eso vamos a pedir un resarcimiento por las pérdidas millonarias que hemos tenido en los diez días del paro”, dijo Germán Mamani, líder de los transportistas. Al cierre de esta edición, el presidente de la regió Tacna, Hugo Ordóñez, que se encontraba en la capital, solicitó una reunión con carácter de urgencia a Del Castillo.

domingo, 8 de junio de 2008

Fases de la lucha antineoliberal

La lucha contra el neoliberalismo ya tiene historia y pasó por diversas fases –desde la resistencia, al inicio de la construcción de alternativas– y enfrenta ahora la contraofensiva de la derecha. En el año de lanzamiento del Tratado de Libre Comercio de América del Norte –1994– los zapatistas convocaron a resistir la nueva ola hegemónica. Ignacio Ramonet llamaba, desde un editorial de Le Monde Diplomatique –1997–, a luchar contra el “pensamiento único” y el Consenso de Washington. El Foro Social Mundial –2001– convocaba a la construcción de “otro mundo posible”. Las manifestaciones contra la Organización Mundial de Comercio (OMC), que se iniciaron en Seattle –2001–, revelaban la extensión del malestar contra el nuevo modelo hegemónico a la vez que exhibían el potencial de la lucha popular. Era una fase de resistencia, defensiva, frente al cambio regresivo de proporciones históricas gigantescas operado por el pasaje de un mundo bipolar a otro unipolar –bajo la hegemonía imperial estadunidense–, de un modelo regulador a uno neoliberal.

En el plano gubernamental, la consolidación de la hegemonía neoliberal se produjo por el pasaje de la generación derechista que la lanzó –Pinochet, Reagan, Thatcher– a una segunda, que algunos de sus protagonistas denominaron tercera vía (Clinton, Blair, Cardoso), ocupando casi todo el espectro político. Esa fuerza compacta se comenzó a resquebrajar con la elección de Hugo Chávez en Venezuela –1998–, concentrándose en América Latina a partir de ese momento con las derrotas electorales de los principales promotores del nuevo modelo –Cardoso, Menem, Fujimori, Carlos Andrés Pérez, el PRI– y exponiendo su fracaso.

Mientras tanto, esa reacción popular se reflejó en los triunfos electorales que sucedieron al de Chávez –Lula (2002), Kirchner (2003), Tabaré Vázquez (2004), a los que se puede sumar el de Daniel Ortega (2006)–, presentándose un escenario diferente al esperado. Aunque victoriosos frente a gobiernos ortodoxamente neoliberales, los nuevos mandatarios no apuntaron a romper con el modelo neoliberal –manteniéndolo con distintos grados de flexibilización– principalmente por el peso que pasaron a tener las políticas sociales.

Esos matices, sumados a la opción por procesos de integración regional –en primer lugar el Mercosur– y la derrota de la Alianza para el Libre Comercio de las Américas –a la que los nuevos gobiernos colaboraron activamente–, revelaban, mientras tanto, diferencias significativas con relación a los regímenes que los antecedieron, contribuyendo al surgimiento de un escenario político inédito en el continente por la existencia simultánea de una cantidad de variadas formas de gobierno que se opusieron a los tratados y fórmulas de libre comercio impulsadas por Estados Unidos, así como a su política de “guerra infinita” –que tuvo sólo en Colombia una adhesión explícita en la región.

Las victorias de Evo Morales (2005) y Rafael Correa (2006), junto con el lanzamiento de la Alternativa Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (Alba), el Banco del Sur, el gasoduto continental y la adhesión de Venezuela y Bolivia al Mercosur, dieron contornos más amplios y fortalecieron un eje de gobiernos que, además de privilegiar los procesos de integración regional, comenzaron a construir modelos de ruptura con el neoliberalismo. En tal sentido, el triunfo del paraguayo Fernando Lugo (2008) ensancha el campo de los regímenes progresistas del continente, al que puede sumarse próximamente El Salvador.

Entre tanto, a partir de 2007, después del golpe relativamente sorpresivo dado por la proliferación de conducciones progresistas en la región, la derecha retomó su capacidad de iniciativa, perdida cuando las fuerzas populares capitalizaron, en el plano electoral, el descontento generado por las políticas sociales neoliberales, el hilo más frágil de la cadena neoliberal.
Para recomponer su capacidad de iniciativa, la derecha –que suma tras de sí a la vieja derecha oligárquica y las corrientes socialdemócratas que adhirieron al neoliberalismo– metió mano en esferas en que su hegemonía no fue tocada o allí donde conserva, en lo esencial, su fuerza: los poderes económicos y mediáticos. Esta contraofensiva asumió caras distintas dependiendo del país, aunque con elementos comunes: crítica a la presencia del Estado y sus regulaciones en los procesos de integración regional y con el sur del mundo. Temas como la “corrupción” –centrado siempre en los gobiernos y en el Estado–, el desabastecimiento, la autonomía de los gobiernos regionales contra la centralización estatal, las supuestas “amenazas” contra la “liberdad de prensa” –identificada por ellos con la prensa privada–, etcétera.

Pasada la sorpresa de la multiplicación de gobiernos en que el control del aparato estatal escapaba a su gestión directa, la derecha retomó la iniciativa. En Brasil, con las campañas de denuncia sobre el gobierno de Lula; en Venezuela –tras el intento de golpe de 2002–, con la defensa de los monopolios privados de medios, señalando la corrupción y el desabastecimento; en Bolivia, oponiéndose a la reforma agraria, la nueva Constitución y la aplicación de otros impuestos a las exportaciones de gas con los que el gobierno central quiere ejecutar políticas sociales; en Argentina, objetando formas regulatorias y el desabastecimiento; en Ecuador, contra la nueva Constitución y renovadas formas de normatividad estatal. Cuenta también con los dos principales gobiernos de derecha en la región –México y Colombia–, que intentan abrir un proceso de privatización de la empresa estatal de petróleo Pemex, en el primer caso, e intensificando el epicentro de las guerras regionales infinitas en el segundo.

Después de haberse quedado paralizada durante los años de expansión de la economía internacional, que favoreció la obtención de recursos del comercio exterior para intensificar sus políticas sociales, la derecha retoma la ofensiva también en el plano de las denuncias acerca de los riesgos de regreso de la inflación; la necesidad de nuevos ajustes, de elevar otra vez las tasas de interés bancario, en la búsqueda retomar la prioridad de la estabilidad monetaria sobre la expansión económica.

La fase actual está marcada por el recrudecimiento de los enfrentamientos entre los gobiernos progresistas y la oposición de derecha en el plano político e ideológico. Las pretensiones de descalificación del papel del Estado ganan destaque central como tema aglutinador en el conjunto de debates y polémicas entre derecha e izquierda. Se perfilan hoy en el continente países que siguen el esquema de un Estado mínimo –como México, que intenta dar inicio a un proceso de privatización de la petrolera Pemex, ejemplo éste del renovado ímpetu privatizador del neoliberalismo continental–; como en Perú, país que adoptó recientemente –al igual que Costa Rica y Chile– un modelo previsional privado.

Por otro lado, hay países que buscan refundar sus estados, con base en esquemas posneoliberales y posliberales, y procuran nuevas formas de representación política, más allá del formalismo liberal, como Bolivia, Ecuador –ambos intentan establecer sociedades plurinacionales, pluriétnicas, pluriculturales– y Venezuela. Asimismo, hay países que ponen en práctica niveles de regulación estatales, sin romper los estados neoliberales prexistentes, pero frenan el desmantelamiento de los aparatos públicos y fortalecen capacidades sectoriales de regulación, lo que frena los procesos de privatización anterior, fomentando el crecimiento del trabajo formal y requipando la funcionalidad y los servicios federales –del que Brasil y Argentina son ejemplos.
El destino del neoliberalismo en el subcontinente no está definido. Continúa siendo hegemónico, sea porque hay países que mantienen ortodoxamente el modelo, porque persiste preponderantemente, de una u otra forma, en varias de las principales naciones (Brasil, México, Argentina, Colombia, Chile, Perú, Uruguay, Costa Rica) en un mundo dominado por el neoliberalismo. Su destino será decidido sobre todo en los tres países con economías más fuertes. De ellos, por ahora México avanza consolidando la hegemonía neoliberal, mientras Argentina y Brasil preservan el modelo –con flexibilizaciones–, aunque amenazados por fuerzas opositoras de derecha.

El espacio más significativo de construcción posneoliberal es la Alba, en que los participantes –Venezuela, Cuba, Bolivia, Nicaragua, más intercambios importantes con Ecuador– construyen relaciones solidarias, y buscan responder a las necesidades y posibilidades de cada nación con alternativas a las leyes del “libre comercio” de la OMC , practicando lo que el Foro Social Mundial denomina “comercio justo”. Ése es un espacio típicamente posneoliberal, que depende de la consolidación de los procesos políticos en esos países.

domingo, 1 de junio de 2008

Contabilizando a los pobres


En el Perú estamos haciendo colectas para que un campeón de ajedrez o matemáticas pueda viajar al exterior, pero tenemos un presidente que plantea organizar una olimpiada. También decimos que la pobreza está disminuyendo sin hacer nada por ella, por el sólo efecto de que aumentan las inversiones en minería y se firman más tratados de libre comercio; pero aceptamos el ingreso de mil marines gringos armados en el la zona caliente del VRAE, con el pretexto de que van a ayudarnos a construir tres postas, abrir dos pozos de agua y reparar dos escuelas. En otras palabras se piensa en grande cuando se quiere y se vuelve a ser chico el día siguiente.


Visto desde fuera, el Perú es un país pobre con múltiples posibilidades de hacerse rico con un poco de dinero y relaciones. Es lo que hacen las trasnacionales que como el consorcio Camisea nos hacen pagar a nosotros mismos sus inversiones, o como LAP, que se manejó entre créditos avalados por el Estado y supertarifas en el aeropuerto. Pero este país es también un modelo de polarización social. Aquí hay niveles de vida de primer mundo al lado de millones en la línea de supervivencia o incluso por debajo de ella. Saber cuántos son estos parias del sistema es la tarea de los medidores de pobreza, pobretólogos, como dice el presidente.


En esencia este peculiar oficio se justifica a partir del reconocimiento de los Estados de su fracaso para impulsar a la sociedad en su conjunto hacia el desarrollo, es decir, invertir y orientar hacia una mejora continua de los niveles de productividad, innovación, educación, bienestar e institucionalidad del conjunto y no de unos pocos. En reemplazo el poder se propuso concentrarse en “los pobres”, que era casi como decir nos enriquecemos pero ayudamos a los que menos tienen. Y para eso tenemos que saber cuántos son esos que no tienen y como evolucionan cada año, y obviamente lograr el aval del Banco Mundial para lo que estamos diciendo.


La disminución estadística del número de pobres es ahora la prueba fidedigna que el modelo funciona y redistribuye, como se ha visto en estos días. Pero sirve también para repriorizar el gasto social. Algo así como determinar si es necesario que sigamos gastando socialmente la cantidad que aplicamos los últimos años. Las cifras de la pobreza del 2007 parecen estar advirtiendo que ha bastado que García cambie, se rodee de empresarios, se trate de tú con Bush y Merkel, y no haga nada más por los pobres, para que éstos disminuyan inconteniblemente.


La nueva ola… de despidos

La escena laboral se torna dramática. Existe, entre otros, el conflicto de la Federación Nacional de Trabajadores Mineros, Metalúrgicos y Siderúrgicos con el Partido Nacionalista.

El punto neurálgico es que la Federación considera negativa la postergación del voto del Congreso respecto al proyecto de ley que elimina el tope de 18 sueldos para la distribución de utilidades mineras. Los parlamentarios nacionalistas habían votado por el aplazamiento.

El Partido Nacionalista ha precisado que su posición es que no se legisle sólo sobre el reparto del ocho por ciento de las utilidades, sino también sobre el 92% restante, y que se incluya en el beneficio a los que trabajan en services y en empresas subcontratistas.

Esa posición puede haber sido mal expuesta; pero resulta justa, si se considera que en el sector minero hay decenas de miles de trabajadores que pueden quedar excluidos de un goce al que tienen derecho, puesto que también son creadores de las gigantescas utilidades que la minería obtiene debido a las altas cotizaciones de su producción en el mercado mundial.

El movimiento obrero peruano, desde su nacimiento, desplegó una bandera que debe flamear en todas las luchas sindicales: SOLIDARIDAD. Es oportuno recordarlo.

Curioso es que Jorge del Castillo, presidente del Consejo de Ministros, haya compartido una cita de prensa con los dirigentes mineros para azuzar la división en las filas sindicales y populares. No hay que olvidar que Del Castillo es, por definición, enemigo de los intereses obreros y defensor de las grandes empresas.

El propio viernes, Del Castillo confirmó la entraña antisindical y proempresarial de su conducta. Dijo que no se podía establecer un impuesto a las sobreganancias mineras. Si eso se hubiera aprobado, alegó, “no tendríamos la lluvia de inversiones que tenemos ahora”.

¿Cuál lluvia? ¿Cuáles inversiones? Que se sepa, sólo hay propuestas, proyectos y promesas.

Habrá que ver la conducta de Del Castillo cuando el Ejecutivo examine la ley que regula la tercerización. Es decir, el creciente recurso de las compañías de recurrir a empresas ficticias, improvisadas por los propios patronos, para eliminar derechos sociales.

El desfachatado chaleco sindicalista del premier es de usar y lavar. ¿No es acaso el jefe de un gabinete impasible ante la ola creciente de despedidos por formar sindicatos o afiliarse a ellos?

No ocurre sólo en el sector privado, con el caso paradigmático de Topy Top, que ha cesado a 150 obreros por el horrendo delito de sindicalizarse. También en el sector público menudean los despidos antisindicales (hemos insistido en el caso Pronaa, donde siguen lanzando a la calle a sindicalistas).

Ese es el turbio panorama laboral en el Perú. Un panorama cargado de nubes negras, preludio de tempestad.